La bicicleta: La muerte lenta del planeta


En la cultura occidental no pensando en nuestra salud, los médicos estamos entrenados para tratar y prevenir enfermedades y no en cuidar la salud. Comemos a veces a deshora, a menudo apurados, nos conformamos con un plato único por falta de tiempo o de ganas, cocinamos poco, nos alimentamos con comida chatarra, compramos todo envasado. Hemos olvidado las recetas de siempre. En el último medio siglo ha cambiado mucho como nos alimentamos y también todo el ritual que durante siglos había acompañado a la comida y que incluía sentarse a la mesa con la familia y comer todos lo mismo. Es fundamental alimentarse en forma consciente y responsable, que meditemos y saboreemos la comida en cada momento y que volvamos a tener un ritual de comer con tiempo.

 Una fake news atribuida a un supuesto “director general de euro Exim Bank Ltd. Sanjay Thakrar”  nos hizo pensar a todos con la siguiente afirmación: “La bicicleta: La muerte lenta del planeta”

Según esta noticia “Un ciclista es un desastre para la economía de cualquier país”. No compra autos y por consiguiente no solicita créditos al banco para comprarlo. No paga pólizas de seguro. No compra ni consume combustible, no paga el mantenimiento del auto y las reparaciones necesarias. No paga estacionamientos. 


No causa accidentes graves ni costosos. No requiere carreteras de varios carriles. Las personas que utilizan la bicicleta como medio de transporte son sanas y en buen estado físico. Esas personas no compran medicinas. No van a hospitales ni a médicos con tanta frecuencia. No requieren de nutriólogos ni realizar dietas costosas. 

En resumen, los ciclistas NO APORTAN NADA AL PIB del país (Producto Interno Bruto). Por el contrario, sabías que cada nuevo restaurante McDonald’s crea al menos 30 puestos de trabajo: 10 cardiólogos, 10 dentistas, 10 expertos en nutrición y, obviamente, los puestos de trabajo para las personas que trabajan en el restaurante. 

PD. Caminar es aún peor. Ni siquiera compran bicicleta. 

No existe un director de Euro Exim Bank llamado Sanjay Thakrar ni tampoco esta institución ha realizado tal afirmación. Pero no todo es malo, aunque la publicación sea falsa no le quita merito al tratar de hace conciencia a la sociedad con respecto al consumismo, la falta de educación financiera y alimentaria. 

La buena noticia es que, en la realidad, aunque suene de manera irónica en el texto anterior la bicicleta es una gran aliada de la economía mundial y personal. A continuación, unos datos que lo confirman:

Según el ITDP (Institute for Transportation and Development policy) Un cambio global hacia un mayor uso de bicicletas y bicicletas eléctricas podría reducir el uso de energía y las emisiones de dióxido de carbono del transporte urbano hasta en un 10 por ciento para 2050 y la sociedad podría ahorrar más de $24 billones de dólares.

Un estudio de TERI (The Energy and Tesources Institute) afirma qué, si las bicicletas sustituyen a los vehículos de dos y cuatro ruedas por viajes de corta distancia, puede resultar en un beneficio anual de 1.8 billones de dólares, equivalente al 1.6% del PIB anual de la India. El mismo estudio señala que sustituir el 50% de los viajes de trabajo realizados por automóviles y vehículos de dos ruedas por debajo de la distancia media de 8 km por el uso de bicicletas puede reducir las emisiones anuales de CO2 en 1 millón de toneladas.

Entre otros beneficios que conlleva el uso de bicicleta están:

  • El importante ahorro en salud pública como producto del uso de la bicicleta.

  • La producción, fabricación, venta y comercialización en grandes cantidades, de todo tipo de bicicletas y accesorios puede ser un motor para economía al generar empleos y fuentes de ingreso.

  • Quienes se desplazan en bicicleta compran con más frecuencia en comercios de la colonia o barrio.



Referencias

Comentarios

Entradas más populares de este blog

¿Formamos médicos o profesionales de la enfermedad? Una mirada crítica a la educación médica occidental

🧠 ¿ChatGPT cambia tu cerebro? El estudio viral del MIT y la verdad detrás de la imagen

¿Cómo funciona un monitor de signos vitales?